lunes, 5 de diciembre de 2011

El mundo es una mierda

Pues empezamos bien este blog. ¿No les parece? Sin haber tan siquiera saludado al lector, si es que lo hay o lo va a haber alguna vez(en cuyo caso pido disculpas por adelantado), empiezo diciendo una obviedad zafia y aplastante. Efectivamente "el mundo es una mierda". Eso ya lo sabemos o al menos creemos saber tras haberlo reiterado una y otra vez los noticiarios desde que existen. De lo contrario no serían noticiarios si no novelas, fábulas, teatro o cuentos chinos. Bueno en realidad la mayoría de las veces son cuentos chinos o verdades a medias pero no con la finalidad más o menos frívola de entretener si no la de acojonar al personal con cataclismos, desgracias, crisis, broncas,... Aunque a veces la televisión es tan aburrida que los noticiarios logran parecerse a una sitcom, sobretodo cuando los periodistas deportivos hacen chascarrillos y comentarios de bar de lo más truño con el locutor que tienen para las noticias serias.

En el mundo del periodismo existe la máxima que reza que "no hay mejor noticia que una mala noticia". ¡Cabrito(el que lo diga)! Eso será para algún tipo de carroñero o psicópata social que se la sude que la gente sufra y lo pase mal. Da la impresión de que los medios se alegran de que sucedan desgracias, sobretodo si el medio es amarillo(chillón).

Cuando la cadena de televisión no tiene mucho que aportar a una noticia "urgente" siempre utilizan el recurso de mostrar un "loop" una y otra vez mientras que el locutor trata de rellenar programa repitiendo lo que acaba de comentar otro interlocutor, por lo general un experto o un opinador tertuliano. Cada pocos minutos hacen un resumen del resumen ya resumido escasos momentos antes. A continuación con pose de interesante el locutor de los estudios centrales conecta con un reportero que se ha desplazado al lugar de los hechos. Éste tratando de poner cara de "dignidad periodística" empieza a explicar lo que ya nos explicó el locutor del estudio cuando leyó exactamente la misma nota de prensa proporcionada y redactada en la misma agencia de noticias de la que están bebiendo los noticiarios de las demás cadenas sin molestarse en añadir o quitar ni una sola coma.

En muchos medios ni siquiera se molestan en re-escribir y explicar la noticia por que simplemente no la entienden. No la analizan lo suficientemente pero a la cadena eso no le importa en absoluto ya que lo que pone son caras guapas, jóvenes ellas, y algo mayores ellos. Han de parecerse a los estereotipos de ejecutivos acorbatados y sepan leer muy bien los "telepronters".

Cabe pensar que el valor de que vaya el reportero es el de confirmar lo que ha pasado. Bueno, en realidad quizá con enviar al cámara sería suficiente en la mayoría de los casos por la vacuidad que adquieren al final las palabras.  En realidad no haría falta enviar a nadie a "cubrir la noticia" por que la noticia ya está cubierta y descubierta antes de llegar. Pero hay que rellenar programa como sea. Dependiendo de la gravedad de la noticia, incluso llegan a enviar al mismo presentador estrella para que lea el telepronter en el lugar de la noticia. Pero eso no significa que se haga mejor el trabajo periodístico. Se hace igual o peor. La finalidad de enviar al presentador estrella no es otra que la de conseguir audiencia. Nunca la de mejorar la calidad periodística.

Da igual que te interrumpan la película de media tarde. Perdone usted, no me interprete mal. No es que yo sea un insensible o no me pueda llegar a interesar o conmover la noticia sino que con el avance informativo ya me han informado. Por más que repitan una y otra vez lo poco novedoso que han conseguido averiguar no me van a aportar nada que no sepa ya. Podrían dejarnos terminar de ver la película y cuando consigan averiguar algo realmente relevante ya me lo dirán. Pero claro, tienen miedo que los espectadores, los cuales no nos engañemos, somos morbosos por naturaleza, dejemos de ver la película para ver el avance informativo que sí está cubriendo la cadena rival.

El ejercicio periodístico da mucho de qué hablar y deja mucho que desear salvo honrosas excepciones. Pero como usuarios deberíamos empezar a cuestionarnos las trampas que nos cuelan constantemente.